Éxodo 38 - hagamos cuentas:
21 Estas son las cuentas del tabernáculo, del tabernáculo del testimonio, las que se hicieron por orden de Moisés por obra de los levitas bajo la dirección de Itamar hijo del sacerdote Aarón. 22 Y Bezaleel hijo de Uri, hijo de Hur, de la tribu de Judá, hizo todas las cosas que YHVH mandó a Moisés. 23 Y con él estaba Aholiab hijo de Ahisamac, de la tribu de Dan, artífice, diseñador y recamador en azul, púrpura, carmesí y lino fino.
El pueblo había ofrendado generosamente para la construcción del Mishkán o Tabernáculo, todos los materiales fueron recolectados por los Levitas bajo la orden de Itamar hijo de Aarón, pero ahora Moisés ordena hacer un detallado informe al pueblo acerca de lo recolectado y usado en la construcción del Mishkán. Cuentas claras, son exigidas por El Todopoderoso. Moisés nos deja aquí una importante lección: debe haber completa y absoluta transparencia en el manejo de las ofrendas y diezmos. ¿Qué es lo que ha servido de piedra de tropiezo para muchos creyentes? La manera como muchas congregaciones o ministerios manejan sus recursos.
Mateo 18:7 ¡Ay del mundo por los tropiezos! porque es necesario que vengan tropiezos, pero ¡ay de aquel hombre por quien viene el tropiezo!